Hace un tiempo Samsung fue pionera en el lanzamiento de un tablet de formato reducido al gran público, nos referimos al Galaxy Tab con pantalla de siete pulgadas. Por aquel entonces este tamaño no era lo habitual en un tablet y la gran mayoría apostaban por pantallas en torno a las diez pulgadas. No obstante el tiempo les ha dado la razón y ya son varias las marcas que han entrado en este segmento, incluida la propia Apple con el iPad Mini. Este tipo de tabletas son más compactas y ligeras, por lo que su transporte es más cómodo pero al mismo tiempo no renuncian a una pantalla amplia, además su precio también es más reducido y aquí radica el secreto de su éxito.
El Samsung Galaxy Note 8.0 viene para marcar la diferencia pero también para competir directamente con el iPad Mini, hacemos una comparación de sus características técnicas más importantes.
Pantalla
Aunque la pantalla de estos dos modelos pueda parecer similar, lo cierto es que hay diferencias que se deben tener en cuenta. En primer lugar el tamaño, 7,9 pulgadas para el iPad Mini y 8 pulgadas para el Galaxy Note, es muy similar ya que sólo se van por 0,1 pulgadas. No obstante aquí hay que hablar de formato, el panel del iPad Mini tiene una forma más cuadrada que da un efecto de mayor amplitud mientras que la relación de aspecto del panel del Samsung Galaxy Note 8.0 es más panorámico. La ventaja de una pantalla panorámica se nota sobre todo al ver películas, como la mayoría están grabadas en formato 16:9 se aprovecha un área mayor sin que aparezcan dos bandas negras arriba y abajo. Por contra el panel del iPad Mini resulta muy cómodo para leer porque es más ancho, aunque remarcamos que la diferencia es sutil.
Por otro lado la resolución juega en favor del Samsung Galaxy Note 8.0, que tiene una ditribución de 1.280 x 800 píxeles y 189 ppi de densidad. El iPad Mini cuenta con una resolución de 1.024 x 768 píxeles y concentra 163 ppi. Con esta configuración ambos ofrecen imágenes nítidas sin que en ningún caso notemos un efecto pixelado o desenfocado, aunque se adelanta el dispositivo de Samsung ligeramente. Por último decir que el panel del iPad Mini es tipo IPS que ofrece mejor visibilidad en ángulo que el TFT del Samsung Galaxy Note 8.0.
Diseño
El diseño es un aspecto muy importante en los productos Apple y este iPad Mini no defrauda en absoluto. La tableta tiene una forma muy sencilla de bordes y esquinas redondeadas que destaca sobre todo por el aluminio de la parte trasera, que además de hacerlo más atractivo también aporta resistencia (está hecho en una sola pieza). Lo que más llama la atención es su delgadez de tan sólo 7,2 milímetros, aunque el Samsung Galaxy Note 8.0 no se aleja mucho y se queda en unos más que razonables 7,95 milímetros de grosor. El frontal del iPad Mini está totalmente recubierto en cristal resistente y llama la atención que la pantalla está muy ceñida a los bordes en ambos laterales, este detalle ayuda a que el dispositivo sea compacto y también ligero (ronda los 310 gramos). Como siempre encontramos la clásica tecla de inicio bajo la pantalla, el botón de encendido en la esquina superior derecha y el interruptor de silencio y el control de volumen en el lateral derecho. El iPad Mini se vende en blanco y aluminio o negro y grafito.
El Samsung Galaxy Note 8.0 también tiene un diseño muy pulido que sigue la línea de los productos más recientes de la gama Note, vendría a ser algo así como un Samsung Galaxy Note 2 más grande. Destacan las formas orgánicas con esquinas redondeadas y el marco plateado que rodea todo el terminal. El material empleado en la construcción es policarbonato, un tipo de plástico muy resistente y duradero, y el acabado es blanco brillante aunque ya se ha visto un modelo en tono negro. Este modelo es ligeramente más largo que su contrincante, pero son apenas una décimas. La pantalla está rodeada por un marco de grosor regular y también está cubierta por cristal resistente. En la parte frontal está el botón físico de inicio, flanqueado por dos teclas capacitivas para retroceder o abrir el menú. En el lateral encontramos el control de volumen y la tecla de encendido o reposo.
No podemos cerrar este apartado sin hablar del S Pen, el accesorio que hace que el Samsung Galaxy Note 8.0 sea un dispositivo diferente y que ofrece prestaciones muy prácticas. Este accesorio se inserta en el propio chasis para que siempre lo tengamos a mano y abre todo un abanico de posibilidades en el manejo del terminal. Desde anotar ideas a mano alzada, hacer bocetos, recortar imágenes, escribir correos electrónicos e incluso resolver fórmulas matemáticas. El iPad Mini es compatible con accesorios similares pero no cuenta con todas las aplicaciones exclusivas del Note 8.0.
Cámara y multimedia
Las tabletas, incluso las de formato reducido, no son dispositivos pensados para hacer fotografías o vídeos. A pesar de ello tanto el Samsung Galaxy Note 8.0 como el iPad Mini equipan un juego de cámaras con las que poder realizar estas tareas con una calidad adecuada. Los dos tienen un sensor de cinco megapíxeles en la parte trasera con funciones similares como enfoque automático, estabilizador de imagen, detector de caras y por supuesto graban vídeos FullHD 1080p.
En el frontal tienen otro sensor de menor resolución (1,2 megapíxeles en el iPad Mini y 1,3 megapíxeles en el Note 8.0) que está enfocado a la realización de videollamadas y graba vídeos HD720p. Destacar que los sensores del iPad Mini tienen tecnología BSI por lo que están preparados para sacar mejores resultados en condiciones de luz escasa.
El apartado multimedia es muy diferente en estos dos modelos. El Note 8.0 es un dispositivo Android y por tanto apuesta por la estandarización y compatibilidad, en este sentido el perfil de formatos soportados es más variado y también cuenta con sistemas estándar como el DLNA que nos permite duplicar la pantalla en nuestro televisor o monitor también con DLNA, es lo que Samsung denomina AllShare Play y AllShare Cast. Por su parte el iPad Mini, como todos los productos de Apple, es mucho más hermético en este terreno. Por ejemplo si queremos añadir una película tendremos que hacerlo a través de iTunes y además tener en cuenta que deberá estar en un formato concreto ya que no soporta vídeos en DivX, mkv y otros tipos de archivo, por tanto tendríamos que convertir la película para poder verla sin problemas.
Apple también ofrece una solución para la duplicación de la pantalla con el sistema Airplay, pero es necesario tener un Apple TV.
Conectividad
Los dos ofrecen soluciones de conectividad similares, aunque el Samsung Galaxy Note 8.0 sigue destacando por la presencia de sistemas estándar. Empezamos con el terminal de los coreanos, lo primero que llama la atención es que es compatible con redes GSM, lo que significa que puede servirnos como teléfono, y también permite la conexión a Internet mediante redes 3G a 21 Mbps de velocidad máxima de descarga (sólo en el modelo con 3G, hay otro sólo con Wi-Fi). También tiene Wi-Fi Direct enfocado a compartir archivos, DLNA para funciones multimedia, Bluetooth 4.0, antena GPS con acceso a satélites Glonass, un puerto MicroUSB y una clavija para auriculares.
El iPad Mini también está disponible en dos variantes, una con conexión a Internet móvil y otra sólo con Wi-Fi. Este modelo permite acceder a redes LTE, aunque de momento en España no se implantado por lo que no nos preocupa, en su lugar podremos navegar por redes 3G también a 21 Mbps. Viene con un puerto Wi-Fi de alta velocidad, Bluetooth 4.0, antena GPS asistida, el conector de auriculares y la clavija propietaria Lightning para cargar la batería o transferir datos.
Memoria y potencia
Ambos modelos están disponibles en varios modelos según la capacidad interna, 16/32/64 Gb en el caso del iPad Mini y 16/32 Gb en el caso del Samsung Galaxy Note 8.0. Sin embargo a pesar de la ventaja del iPad Mini porque cuenta con una opción de 64 Gb, el Samsung Galaxy Note 8.0 se adelanta por mucho ya que cuenta con una ranura para tarjetas MicroSD de hasta 64 Gb extra, con lo que se puede ampliar la memoria y llegar a superar a la de su contrincante.
Llegamos al apartado de la potencia, un punto en el que el Samsung Galaxy Note 8.0 se impone de forma brutal con su procesador Exynos de cuatro núcleos a 1,6 gigahercios. Para rematar lleva dos Gb de memoria RAM que aseguran un rendimiento muy rápido. El iPad Mini tiene un chip Apple A5 de doble núcleo y tan sólo 512 Mb de memoria RAM, no obstante hay que remarcar que iOS es una plataforma que está perfectamente optimizada y funciona muy fluida.
Sistema operativo y aplicaciones
Si hemos ido viendo diferencias a lo largo de todos los puntos analizados, el del sistema operativo es sin duda el que más aleja a estas dos tablets. iOS y Android son dos sistemas operativos parecidos en el sentido de que están basados en aplicaciones, pero su concepción es radicalmente distinta. Esta cuestión da para escribir largo y tendido, sin embargo resumimos en que Android es un sistema abierto que ofrece mucha más libertad de movimiento a los usuarios mientras que iOS es un entorno cerrado y está totalmente controlado por Apple. Ambas plataformas ofrecen un ecosistema muy amplio y variado con una oferta de aplicaciones que hace tiempo que superó el medio millón de contenidos disponibles. La elección en este punto depende totalmente de las necesidades y preferencias de cada usuario.
Entrando en detalles el iPad Mini cuenta con iOS 6, la versión más actual del sistema y que cuenta con novedades como los Mapas de Apple, la integración con Facebook o el asistente de voz Siri en español. iOS es un sistema muy centralizado en el sentido de que todos los dispositivos cuentan con las mismas funciones sin que haya diferencias notables, cosa que no ocurre con el Samsung Galaxy Note 8.0. La nueva tablet de Samsung pertenece a la familia Note, caracterizada por la presencia del S Pen, y por tanto viene con una serie de funciones exclusivas de estos dispositivos como S Note, S Planner, Easy Clip, Comandos rápidos o Paper Artist -todas ellas enfocadas a sacar todo el partido de esre accesorio-. Además también cuenta con otras funciones como Multi-View -para poder usar dos aplicaciones a la vez con la pantalla partida- o Smart Stay -detecta si estamos mirando la pantalla para mantenerla encendida-. El Samsung Galaxy Note 8.0 sale de fábrica con Android 4.1.2, una versión muy actual que viene con mejoras como el asistente Google Now o el sistema Project Butter que mejora el rendimiento.
Batería
La batería suele ser un problema en los smartphones pero las tablets son dispositivos más grandes y aceptan piezas de mayor capacidad, por tanto la autonomía se dilata considerablemente. El iPad Mini ofrece una autonomía muy dilatada de hasta 10 horas dando un uso intensivo (navegar por Internet). El Samsung Galaxy Note 8.0 lleva una pila de nada menos que 4.600 miliamperios, más que suficiente para que pueda aguantar sin cargar varios días seguidos aunque la usemos a menudo.
Conclusiones
El Samsung Galaxy Note 8.0 llega pisando fuerte en el segmento de los tablets de formato más reducido. Este modelo recién presentado hace gala de una hoja técnica muy completa que destaca sobre todo por su potencia, la variedad de conexiones (incluso se puede usar como teléfono) y su pantalla amplia y definida. Todo esto combina con un diseño atractivo y por supuesto el S Pen, con todas las funciones exclusivas que incluye. El Note 8.0 es el tablet perfecto para los usuarios más creativos que quieren tener todas sus ideas a buen recaudo, además es compacto y ligero. El iPad Mini cumple en la mayoría de aspectos, sobre todo en su diseño que es difícil de superar. Sin embargo sigue pecando de falta de compatibilidad y prestaciones técnicas un poco por detrás de la competencia.
